14 de junio de 2025
El Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez, que se conmemora cada 15 de junio, fue adoptado en 2011 por las Naciones Unidas. Esta fecha es una oportunidad para reflexionar, sensibilizar y tomar acciones para prevenir el abuso y maltrato hacia las personas mayores en distintos ámbitos de la sociedad.
Según datos publicados por las Naciones Unidas, se estima que 1 de cada 6 personas mayores de 60 años ha sufrido algún tipo de maltrato durante el último año. Incluso, un estudio reciente respaldado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló que casi el 64 % del personal de instituciones de servicios de cuidado a largo plazo para personas mayores admitió haber cometido actos de maltrato durante el año anterior.
Además, en los últimos meses en la región del MERCOSUR se han observado actos de violencia directa y explícita por parte de agentes públicos hacia las personas mayores.
Esta realidad impone un urgente cambio, tanto desde el Estado, como desde la sociedad en su conjunto.
En el ámbito del MERCOSUR, la Reunión de Altas Autoridades sobre Derechos Humanos del MERCOSUR (RAADH) impulsa y coordina políticas públicas para la promoción y protección de derechos de las personas mayores. En este marco, desde la RAADH se han hecho considerables aportes para la redacción y posterior adopción de la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos para las Personas Mayores, aprobada en 2015 por la Organización de los Estados Americanos (OEA).
De acuerdo a la Convención, se entiende por maltrato toda “acción u omisión, única o repetida, contra una persona mayor que produce daño a su integridad física, psíquica y moral y que vulnera el goce o ejercicio de sus derechos humanos y libertades fundamentales, independientemente de que ocurra en una relación de confianza”.
Asimismo, la violencia contra la persona mayor refiere a “cualquier acción o conducta que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la persona mayor, tanto en el ámbito público como en el privado”.
En ese sentido, cabe señalar que existen diferentes tipos de abuso: maltrato físico, sexual, psicológico, explotación laboral, financiero, patrimonial, la expulsión de su comunidad y toda forma de abandono o negligencia que tenga lugar dentro o fuera del ámbito familiar o unidad doméstica o que sea perpetrado o tolerado por el Estado o sus agentes dondequiera que ocurra.
En línea con la Convención Interamericana, desde el IPPDH, destacamos la necesidad de que los Estados adopten las medidas legislativas, administrativas y de otra índole para prevenir, investigar, sancionar y erradicar los actos de violencia contra las personas mayores, así como aquellas que se requieran para reparar los daños ocasionados por estos actos.
Remarcamos también, la importancia de promover la creación y el fortalecimiento de servicios de apoyo para atender los casos de violencia, maltrato, abusos, explotación y abandono de la persona mayor, y fomentar el acceso de la persona mayor a dichos servicios.
Es urgente establecer o fortalecer políticas públicas y mecanismos de prevención de la violencia, en cualquiera de sus manifestaciones -dentro de la familia o fuera de ella-, para garantizar una vida digna y plena para todas las personas mayores.